Hoy son muchos los artículos que invaden los medios de comunicación, sobre la “muerte de Bin laden”. Los ríos de tinta que hace diez años hablaron de la sangre derramada, hoy esas líneas son de vítores por la captura del “cazador cazado”.
Pero hay un pantanoso y farragoso mar de dudas, ¿Dónde? ¿Qué parte del océano se castiga con su cuerpo? Allí, yace la semilla muerta de un mal que será leyenda…
No escribiré más veces ni citaré el nombre de un asesino. Al que sus fervorosos fieles siguieron bajo la gracia de un Dios, la fe con sangre no entra…
El fanatismo ejerció poder sobre la ignorancia, asediando así a perder la vida por unos ideales a un ejército de almas vacías, y mentes desocupadas.
Que crueldad recordar cada año la muerte de inocentes y ahora que clamen al cielo si las formas de detención por este “pobre diablo” fueron arbitrarias o poco condescendientes. En fin este mundo se engangrena y detrás de una guerra Santa no hay beatificaciones, solo mártires que en silencio esconden su pena, su muerte no alivia a esos hogares que se quedaron mutilados sin amor, sin beso después de la cena… solo la justicia si llega.
Mundy, no hay mas peligro que un pensamiento radical y una fe seguida hasta la extenuación.
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡POR FAVOR BASTA YA!!!!!!!!!!! NO MAS MUERTES PARA LA PAZ
Urbana 7.
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