martes, 12 de julio de 2011

El paso del tiempo

Pasa el tiempo y no noto tu mirada como una prolongación del deseo, a veces se desvanece en el intento por comprender que pasó entre los dos.
El vendaval de emociones que movía nuestro mundo está anclado en el tiempo. Ya mis manos no son la estrecha calle que cruza tu cuerpo en las noches y mi piel no sabe de tu calor, tu tacto es frío…
Se me fue tu amor, por raudales, ese bello ópalo que admiraba en tus ojos ya no brilla, se murió y agonizó lentamente la talla de mi vida.
En los rincones, de rodillas los amantes, piden una cruz para colgar las flores por un amor, que ya lejos en las últimas camina con la belleza serena que da la pasión cuando termina.
Se quedan vacías las calles, desierto el cielo sin una estrella como tu, no puedo llorar sin notar tu suaves labios recogiendo mis lágrimas…
Ahora ya es tarde para volver a la bendita rutina de la que me quejaba ayer, y hoy tan añorada, vagando por la sinrazón me pregunto ¿Porqué pasó un día sin amarte, sin besarte, sin darte todo, lo que hoy gozas con el? Que tenga que verte como amiga cuando aún te amo y cuando tú me esperabas yo de ti pasaba…
Ahora ya es tarde, nadie sabe de este dolor y mi color es negro marrón así son mis días al sol.
Lanzo al viento este cataclismo que es besarte colgado al recuerdo sabiendo que hoy duermes a su lado y yo, ya nada tengo.
Prefiero tu felicidad, pero no me pidas ser mi amiga si yo te quiero ahora más que nunca y por ti daría toda mi vida. Prefiero olvidar que una mujer como tu me quiso… fallidos intentos. Lo sé, viviré con ese castigo, con esa cruz que los amantes supieron dar jardín.
Urbana 7.
 
Mundy, hoy la melancolía me acompaña en casa, le cierro la puerta pero se empeña en pasar así que bueno… la puse un té rojo con canela y la escuché.
Me contó que la vida sin amor no es nada y que lo que da lo quita, hay que saberlo tratar bien, todos los días, un gesto, una caricia, unas miradas…
Que razón lleva, pero hemos hecho un pacto ella y yo ahora nos daremos un baño de relajante y saldremos a buscar ese puntito de bohemia e ilusión que cada noche nos está esperando, más allá de la carretera. Dicho esto, nos vemos en los bares, cuento contigo, contigo y contigo, ¿vale?
Un saludo, Mundy, si abrígate y ponte ese pantalón tejano que te queda tan bien, hoy seguro ligas, pero no me seas infiel Mundy, mañana aquí, eh, ja ja ja.
Inscrita en el Registro de la Propiedad Intelectual

3 comentarios:

  1. bueno yo... yo no se escribir tan bien como la gente que andais por aqui y menos aun como tu, Urbana7, pero no me resisto a felicitarte por esta entrada y por todo tu blog.... llegué aqui casi de casualidad, pero me encanta y lo seguire... sigue asi!!


    Tuareg :)

    ResponderEliminar
  2. Te ha rozado la melancolía, Urbana. A mi me pasa a veces... y a todos. Pero luego respiro contenta y siento cuando la nube se va y vuelve el aire fresco a mis pulmones. Siéntelo tu tambien, amiga, y recuerda que el mundi nunca te será infiel y volverá cada noche a tu vera a sentir ese calor que les das y esos besos que le acarician por toda su piel azul...

    ResponderEliminar
  3. La noche era fria i el mar un tanto revuelto , sabia perfectamente que esparaba en vano , ni el mejor cebo atraeria nada esta noche, pero me sentia comoda alli miedio muerta de frio , sola,contandole a jupiter , rei del cielo por esta noche, mis mas intimos secretos, sobre las 19 jupiter se dejo caer all mar i decidi recojer ,pero goce de este estraño silencio a pesar del ruido de las olas.

    ResponderEliminar