domingo, 10 de julio de 2011

Mi querida libertad

Háblame a que sabe la libertad…
Tras los muros y puertas abiertas.
¿Cómo es el sol, en el levante azul?
¿Pregunta por mi la vida?
Aquí los días son, silencios de la cripta de mi muerte, son pardos mis pensamientos en un mundo sin horizontes.
Hago un acorde con las horas que mueren, sin haber amanecido.

Si vida mía, si.
Miguel del alma mía.

Que ilusión ver tu cara, y tocar tus manos las que brotan poemas de amor en una celda inerte.

La luna ya no reza en tus labios, las mañanas se tiñen de gris.
Tu, que eres un hombre de palabra sincera, y solo quieres igualdad.
Tu que amas a la montaña, vives en soledad…
Sueño que sales libre, llegas a mi lado y como poeta me quieres, como hombre me amas.
Estás dormido, el sol anida en tu cara, sobre la hierba fresca descansa tu alma.
Tu cuerpo es mío como el sol de la mañana, somos dos, como una llaga que sangra… tu me cantas la nana que cobija al alba.
En ese momento despierto, cuando abrías tus ojos, mirada bucólica, tierna semblanza, de un hombre libre entre maraña.
Me moriré sin ver como se emancipan tus palabras, será el destino quien ponga los versos que escribes en el camino.
¡ay Miguel, cruel tu desenlace!
Un arte que murió empezando a vivir, querías ser libre te juzgaron a morir…
Tus palabras no mueren tienen alma, abriste ventanas muerto en vida.
Urbana 7.
Por la libre expresión y el respeto a la memoria de un hombre que amó y lucho hasta su muerte. Su alma es libre y vive para recordar, aún en nuestros días, que de hambre se muere y el pensar distinto es una plaza vetada.
Amar en tiempos revueltos es difícil, el deseo no atiende a ideologías, es el mismo amor, pero en distinto frente.
Mundi, encendamos las velas blancas y que los faros no cesen esta noche, es el hades de las vidas que llegaron y si vuelven.
Lo bello es bello porque existe la fealdad humana, contraria la vida, pero tan cotidiana, como saber que solo somos libres soñando…
Inscrita en el Registro de la Propiedad Intelectual

1 comentario:

  1. Sigues cultivando mi adicción a Urbana. y en estas letra tuyas..estoy seguro..que el propio Miguel te dicaria una nana...no de la cebolla, sino de la ilusión.

    Ilusión, pasión, que pones en tus palabras.
    Miguel, si hubiera leido estas palabras, frases tuyas, seguro que su calvario final, hubiera diso algo menos, por que escribir eso a un hombre, poeta, amnate de la libetad, amante de la vida le hubiera llenado de satisfacción.

    Permiteme que te de un beso en nombre de él.

    sigue acrecentando mi adición, me gsuta

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