El mar hace marineros, el mar se revela al sueño del poeta, y dibuja los caminos que a pie no conseguimos conquistar.
Se hacen charcos en la arena porque lloran las gaviotas, tristes y solas como maletas perdidas dan vueltas esperando ver de nuevo una costa conquistada de jóvenes bucaneros. Se fueron los fornidos muchachos abandonando el pantanal con un manto tejido de suspiros por sus bonitas caras muchas difíciles de olvidar…
Mar caprichosa de un revés quitaste a soplo de mástil la belleza lozana de un don Juan que honrará al mismo fantasma de la opera, cuando baje el telón.
Pero en cada puerto contará una historia distinta de las cicatrices de la vida siempre hay pan con que comer y heridas que con sabor a sal son las menos digestivas pero las más recordadas.
El milagro anti edad es cumplir años y restar prejuicios, si una cara bonita abre puertas, pero la belleza es efímera y caprichosa. Es más hay modelos que tienen mejor aspecto cuando pasan los años seguramente es porque disfrutan como mortales y no como estrellas.
Este escrito es en alusión por un accidente a un tripulante de la Volvo Ocean Race, ¡LE DUELE LA CARA POR SER TAN GUAPO! Ja ja ja.
¿Soy cruel? Si opinas que lo soy no te cortes y escribe un comentario.
Buenas noches y que conste que no alardeo que el libro de los gustos está en blanco, pero yo no tengo mal gusto.
Urbana 7.
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