Derrumbada la fortaleza en el sosiego más profundo y vacilante cesó de llorar la bella dama. Los ojos tímidos y el mutismo de su mirada alzaban en su rostro el coraje y el valor que nunca se pierde aún quedando desarmado el castillo de los sueños…
Comezón en la mejilla que lleva lágrimas marcadas, ojos con fondo de mar revuelto ojeras marcadas de una mala noche de mil malas rachas.
Desconsuelo que mecen las horas, porción del alma en pena que abriga con destreza para despuntar en la liga de los campeones. Enjuaga su cara con las batallas ganadas y promete no ver el recuerdo para sentir la alegría de lleno.
Con las manos abiertas hace unas coronas de besos que vuelan en pájaros como molinos de viento.
Veleta a pedales con acuse de recibo llegan tarde las noticias y los mensajes en cartones de vino… ya no son noticias los besos de amor, ya no hay pucheros que calmen su pena, ni un cuento con los secretos para un día sin pensar;
¿Por qué la vida reta cuando más se necesita el verbo amar?
Urbana 7.
MUNDY, todos pasamos por la misma puerta pero el cuando condiciona mucho, solo aquellos que saben y ven un adiós que poco a poco se va pueden ver el fondo de un mensaje como este. Un beso y hasta mañana.
Urbanos, disfrutar lo que queda del verano, tomaros esta noche una copita por mí, como siempre digo nos vemos al fondo del bar…
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