Por ELLA.

Con 31 primaveras vuelvo a estar en la tierra que me vió nacer, crecer y un día sin entenderlo me vió marchar. Ahora me siento a pensar la grandeza que es tener una familia que te quiera y una madre que lucha a codazos por verme feliz... Por ella muevo mi mundo con el cuidado de no romper la paz que habita en sus ojos verdes.
La felicidad es efimera por eso no hay amargura que cien años dure. Las canciones de amor no me molestan pero me dan risa porque se esconde mucha ironía en muchas y las de desamor me hacen pensar que si todos triunfan más cantando al desgarrado corazón ¿ Para que pierden el tiempo cantando a esa mujer que la perfección arranca de los ideales y destrona de la realidad?
Cuando estamos enamorados no sabemos trasmitir nada más que el puñado de felicidad que vemos en los ojos del otro. Cuando podemos ver sentir aveces ya es tarde pero sentimos la necesidad de decir adiós ...
Un adios que abre los ojos para poder escuchar todo lo que no viste por Amor y oir como llueve y sale el sol todos los días. URBANA7.